

... El proyecto es para el arquitecto como el personaje de una novela es para el autor: lo supera constantemente. Es preciso no perderlo. El diseño lo persigue.
Mas el proyecto es un personaje con muchos autores, y se hace inteligente en cuanto así es asumido; y obsesivo e impertinente en caso contrario.
El diseño es un deseo de la inteligencia. Alvaro Siza